Tarta Vasca con base de masa quebrada

La Tarta Vasca con Base de Masa Quebrada es un postre tradicional y delicioso, originario del País Vasco francés. Se caracteriza por su doble capa de masa quebrada que encierra un cremoso relleno, generalmente de crema pastelera o mermelada. Es una tarta reconfortante, ideal para compartir en cualquier ocasión.

Tiempo de preparación: 45 minutos

Tiempo de cocción: 50-60 minutos

Raciones: 8 porciones

Ingredientes

Para la masa quebrada

  • 250 g de harina de trigo todo uso
  • 125 g de mantequilla sin sal, muy fría y cortada en cubos
  • 75 g de azúcar glas
  • 1 huevo grande
  • 1 pizca de sal

Para la crema pastelera

  • 500 ml de leche entera
  • 4 yemas de huevo grandes
  • 150 g de azúcar
  • 50 g de maicena (fécula de maíz)
  • 1 cucharadita de esencia de vainilla
  • Opcional: ralladura de 1 limón o naranja para aromatizar

Para el montaje y acabado

  • 1 huevo batido para pincelar
  • Mermelada de cereza o la de tu preferencia (opcional, para una capa extra de sabor)

Instrucciones

Preparación de la masa quebrada

  1. En un bol grande, mezcla la harina, el azúcar glas y la pizca de sal.
  2. Agrega la mantequilla fría en cubos y, con las yemas de los dedos o un estribo de repostería, mezcla hasta obtener una textura arenosa, como migas de pan. Evita amasar en exceso para no desarrollar el gluten.
  3. Incorpora el huevo y mezcla hasta que la masa se una y forme una bola. Si es necesario, puedes añadir una cucharadita de agua muy fría si la masa está demasiado seca.
  4. Divide la masa en dos porciones: una un poco más grande (aproximadamente 2/3) para la base y la otra más pequeña (1/3) para la cubierta. Envuelve cada porción en papel film y refrigera por al menos 30 minutos.

Preparación de la crema pastelera

  1. En un cazo, calienta la leche a fuego medio hasta que esté a punto de hervir. Si usas ralladura de limón o naranja, agrégala a la leche mientras se calienta y luego retírala antes de seguir.
  2. En un bol aparte, bate las yemas con el azúcar hasta que la mezcla blanquee y esté cremosa.
  3. Incorpora la maicena tamizada a la mezcla de yemas y azúcar, batiendo hasta que no queden grumos.
  4. Retira la leche del fuego. Vierte un poco de la leche caliente sobre la mezcla de yemas, batiendo constantemente para temperar las yemas y evitar que se cocinen.
  5. Incorpora la mezcla de yemas al resto de la leche en el cazo. Regresa el cazo al fuego medio-bajo y cocina sin dejar de remover con unas varillas, hasta que la crema espese y hierva suavemente por un minuto.
  6. Retira del fuego, agrega la esencia de vainilla y mezcla bien.
  7. Transfiere la crema pastelera a un bol, cubre con papel film directamente sobre la superficie para evitar que se forme una costra, y deja enfriar por completo a temperatura ambiente y luego refrigera.

Montaje de la tarta

  1. Precalienta el horno a 180°C (350°F).
  2. En una superficie ligeramente enharinada, estira la porción más grande de masa quebrada con un rodillo hasta obtener un círculo de aproximadamente 3-4 mm de grosor, lo suficientemente grande para cubrir la base y los bordes de un molde redondo de tarta de unos 22-24 cm de diámetro (preferiblemente desmontable).
  3. Con cuidado, forra el molde con la masa, ajustándola bien a la base y a los lados. Corta el exceso de masa que sobresalga demasiado del borde. Pincha la base con un tenedor varias veces.
  4. Si deseas, extiende una capa fina de mermelada de cereza sobre la base de masa.
  5. Vierte la crema pastelera fría sobre la base de masa, extendiéndola de manera uniforme.
  6. Estira la porción más pequeña de masa quebrada para formar un círculo que cubra la tarta.
  7. Coloca esta tapa de masa sobre la crema pastelera. Presiona los bordes de la masa superior con los de la base para sellar la tarta, puedes usar un tenedor para crear un patrón decorativo.
  8. Con un cuchillo, haz un pequeño agujero en el centro de la tapa para que escape el vapor durante la cocción.
  9. Pincela la superficie de la tarta con huevo batido para un acabado dorado y brillante.

Horneado

  1. Hornea la tarta en el horno precalentado durante 50-60 minutos, o hasta que la masa esté dorada y el relleno ligeramente firme.
  2. Retira del horno y deja enfriar completamente sobre una rejilla antes de desmoldar y cortar. La tarta debe estar bien fría para que la crema pastelera tenga la consistencia adecuada.

Sugerencias y Notas Adicionales

  • Masa Quebrada Perfecta: Para una masa más crujiente, puedes hacer un «horneado ciego» de la base antes de rellenar. Cubre la masa en el molde con papel de horno y rellénala con legumbres secas o bolas de cerámica para hornear. Hornea por 15-20 minutos, retira el papel y las legumbres, y hornea 5-10 minutos más antes de rellenar.
  • Variaciones de Relleno: Aunque la crema pastelera es lo tradicional, puedes rellenar la tarta con mermelada de frutas (cereza, frambuesa, durazno) o incluso una mezcla de crema pastelera y frutas frescas.
  • Conservación: La Tarta Vasca se conserva bien a temperatura ambiente por un día, o en el refrigerador por 3-4 días. Sácala del refrigerador unos 20-30 minutos antes de servir para que la crema esté más suave.
  • Decoración: Puedes decorar la superficie con un lauburu (símbolo tradicional vasco) antes de hornear, o espolvorear con azúcar glas una vez fría.

¡Espero que disfrutes de esta deliciosa Tarta Vasca casera! ¿Te gustaría probar otra receta?